Recuerdo que el primer acercamiento de educación
virtual, fue a través del SENA, con su oferta de cursos online, el propósito de
participar fue el interés de profundizar en temas ambientales, porque siendo
licenciada en biología y química, en la práctica fui descubriendo la
inclinación hacia esta área. Ya en convenio
con la Federación de Cafeteros, la fundación Manuel Mejía, deciden implementar
en la plataforma e-learning la capacitación en temas de café como estrategia
para fortalecer las competencias laborales de los empleados. Ya el propósito
cambio a una causa "requisito" para el cumplimiento de metas e
indicadores dentro de la institución.
En ambas situaciones resultó interesante el poder
seleccionar el tema de estudio dentro de una amplia oferta, tener acceso
“permanente” al cronograma, los módulos, actividades, formas de evaluación y
documentos de apoyo. Toda una novedad navegar en el curso descubriendo en cada
búsqueda la finalidad del mismo, además de sentir el respaldo del
tutor bajo la sensación de enseñanza personalizada.
Aunque las actividades se van desarrollando de
manera cíclica y con tiempos definidos, la incertidumbre suele ir y venir en
todo momento. Creo que el mayor obstáculo que presentan estas experiencias una
vez superado el reconocimiento y dominio del sitio, sigue siendo la
orientación, me explico, se tiene claro que debe presentarse un trabajo en una
fecha y con unos criterios definidos, pero pueden existir enredos por
ejemplo, en la forma de envío, en un lugar (espacio dentro del módulo o correo
general) etc. Pareciera un problema de comunicación o interpretación.
Un aspecto agradable pero que se va volviendo
detestable es el asunto de la autonomía, saber que es uno quien decide como
invierte su tiempo para cumplir con todos los compromisos, es difícil de
manejar pues la posibilidad de dilatar el tiempo es bastante atractiva pero al
final la carga termina desmotivando la participación, la calidad y por ende el
aprendizaje. De otro lado descubrir que se tiene acceso a la información, como
en el colegio cuando debíamos realizar el taller de la pagina 68 y 69 pero sin
mirar las respuestas que estaban en la ultima hoja del libro; poder disponer de
ella para dar respuesta “SIEMPRE” a los interrogantes con la completa certeza
de acertar, generaba una sensación de control de la situación con picardía,
pero que en el momento de recibir la certificación, iban aflorando ciertos sin
sabores de lo no aprendido realmente.
Aunque se proponen trabajos en grupo de carácter
colaborativo, en mi experiencia fue completamente imposible concretar y
finalizar una actividad con alguien asignado que sólo encontraba en
la red, ya en el trabajo institucional con el grado de compromiso y
responsabilidad inmerso en estos cursos y pese a las distancias, se logro hacer
uso de herramientas comunicativas logrando los objetivos; lo más cómico, es que
las dificultades del trabajo en equipo resultan siendo las mismas en el espacio
real que en el virtual.
Finalmente creo que lo más llamativo de estas
experiencias ha sido poder tener acceso a los documentos y presentaciones, pues
en otros tiempos relucía la confidencialidad de la información, contar
con el módulo en el PC era un éxito total. Lo mas triste, por un lado, comenzar
el curso con toda la disposición, permitirse la recarga de trabajo
para resultar haciendo cualquier cosa por cumplir y almacenar el módulo , los
textos recomendados, con la idea de revisarlos “en el tiempo libre”. Por otro
lado sentir que ha fallado completamente la capacidad para retener información y
que la memoria no esta bien o ya no sirve, concluyendo que el aprendizaje fue
mínimo.
Estoy de acuerdo con generar y hacer uso
de espacios de educación virtual pues evitan el desplazamiento y logran ser
eficientes si se hace una buena distribución del tiempo, pero creo que se debe
continuar con el apoyo y acompañamiento de un tutor, en caso de no tenerlo es
“Fundamental” mejorar la forma de comunicar y transmitir la información,
con tal claridad que oriente a los estudiantes.
¿Quién está al otro lado de tu clase virtual?... La idea de participar en ese tipo de procesos que has vivido y experimentado, y saber que quieres expresar tus inconformidades... pero pareciera no valer la pena; pues, al fin y al cabo el que está al otro lado (sí realmente está) ya tiene suficiente con avisarte que el tiempo se te agota, que la fecha límite es tal... y que además debes apresurarte para que no pierdas el ritmo de trabajo propuesto.
ResponderEliminarNada más satisfactorio que acoplar el interés que se tiene por aprender a manipular los dispositivos tecnológicos, con el ritmo personal de aprendizaje basado en la motivación, la curiosidad, y la capacidad de construir, proponer, equivocarse, reflexionar y volver a intentarlo.
Muy interesante la forma como resaltas la importancia del acompañamiento, la comunicación y la retroalimentación asertiva.
Feliz noche!